sábado, 5 de enero de 2008

el año que vivimos en peligro.

Me disculpan por el vergonzoso exabrupto-cliché del título, pero el 2007 lo amerita. Después de cinco años de universidad que fueron una laguna mental, los planes concretados a medias del 2005 y lo sin gracia del 2006, tenía que venir un año decente, cómo tanto.

Las cosas fueron un poquito como prometían ser en la adolescencia cronológica -porque me temo que la otra sigue aquí- y logré retomar las riendas que nunca debí soltar. Que se soltaron solas producto de la frustración académica, la incapacidad de avanzar y rollos de relaciones humanas ya solucionados.

En el puto 2007 hice lo que quise: viví más tiempo en Santiago que en Temuco, viajé fácil unas 30 veces en bus de una ciudad a otra, supe lo que era ducharse con agua fría, tener hambre, caminar a lo largo de tres comunas para ahorrar en micro y reemplazar la Coca Cola por Citrus Líder, hice un diplomado que fue lo único académico que ha valido la pena en toda mi vida, murió mi abuela, me cambié de casa en Temuco, atropellaron a mi vieja, conocí el Dr. Pepper, fui a las MIB, tuve el 18 de septiembre más extraño de todos, cambié mi Mac Mini por un iBook G4 y mis viejos Nex por un iPod como la gente, conseguí un trabajo 9-to-6, conseguí otros potenciales trabajos en menos de tres meses, gané mi primer millón, tuve amigos y amigas adorables y vi y leí más que en los últimos cinco años. Una carita feliz por todo eso.

Y el 2008 empezó tan extraño que ni me atrevo a mencionarlo.

Como que de aquí en adelante los años no pueden sino ir siendo sucesivamente mejores. Hasta morir relativamente joven, dejar un cadáver saludable y un mito que intrigue a las generaciones venideras.

2 comentarios:

hueon snob. dijo...

PERO /KHOMO LE POSTIASTE A /KHOMO PERO /KHOMO"

Unknown dijo...

parece que todos tuvimos un año nuevo raro.

al menos todos los que conozco o leo.

que significara eso, JP?
ultimamente me paso en eso, buscando explicaciones que no van a ningun lado.

saludos desde españa

M.