martes, 8 de abril de 2008

la granja de jotapé.


1. La vida se puso softcore y yo no me di ni cuenta.

2. No hay nada que un paquete de papas fritas del local que está al frente del Santa Isabel de Bulnes, ahí al lado del Papymol quemado y la farmacia del Dr. Simi, no pueda arreglar.

3. Cuando falta motivación para todo, una torta del Marriet viene de perillas.

4. Este blog se convertirá definitivamente en la Guía Gastronómica de Temuco.

5. Me carga el glamour picante y la moral Fondart del Altazor. Si algún día resulto nominado, recuérdenme borrar esto.

6. La lluvia chocando en el techo es uno de los grandes placeres de la vida. Sólo lo pude tener dos o tres veces el 2007. Así que este año me quiero vengar.

7. Alto del Carmen con Báltica, nunca más.

8. Extraño la época en que no me costaba escribir. Cuando ambientar la novela en 1999 me parecía una buena idea. Cuando quería mandar artículos a algún lado. Cuando tenía blog y tenía lectores y empezaba a escribir y de repente pum cuatro párrafos llenos de pesadeces de leche con chocolate, pensamientos pseudo-profundos, dobles lecturas para iniciados y mensajes subliminales para los amigos. Lo releo y me parece tan asquerosamente cándido, pero es mejor que nada. Ahora como que para qué escribir. Para dejar constancia, ¿pero de qué? Las historias me cansan. Nunca tienen finales tan buenos como en la vida real. Mejor dicho, nunca tienen finales. Escribir la gran novela interminable chilena es una opción, pero qué lata. Debería escribir una soap-opera gringa, de esas que llevan 40 años al aire. Y que se termine cuando me muera.

9. No entiendo cómo hay gente que le tiene pánico a la muerte. Si te mueres, no tienes cómo lamentarlo. No entiendo cómo alguna vez le tuve pánico a quedarme dormido y no despertar al otro día, o a que se me olvidara respirar, a que mi acto reflejo dejara de ser reflejo por alguna recóndita razón. Ahora, lo que me da miedo es ser viejo. Ser viejo y cachar que me quedan 10 años de vida y no podré ver las películas o leer los libros que habrán después, o no saber qué va a pasar con la gente cercana. Claro, ahora también podría pasar eso. Pero la no-inminencia me tranquiliza. Como que igual el 2020 tendré 38 años y diré "hey, ya, no me morí". Ser viejo y tener cáncer y que siempre me esté doliendo algo y necesitar Viagra o ni siquiera necesitarlo porque there's no chance y pensar que ésta, la de ahora, fue la mejor época de mi vida.

10. Soy tan resentido que me gusta ser resentido y eso hace que en realidad no resienta tanto nada. Soy tan resentido que se me pasó.

2 comentarios:

Unknown dijo...

igual
a veces extraño a humedad de temuco
parece que me voy a pegar un viaje
jajaja


ya chao -oh

the new ugly dijo...

ella es de temuco! :D es preciosa un amor de mujer